jueves, octubre 15, 2009

Hoy que no estás

La luna preguntó por ti,
yo no sé si dije bien, pero dije que no estabas.
Dije y digo ahora lo que siempre se dice
cuando algo anda mal,
cuando se dijo lo que se tenía que decir
y si no se dijo, ya no sirve decirlo más.

La luna insistió por tu presesncia
sin notar que la ausencia era de mi,
no notó que me faltaba algo,
ni siquiera se fijo en mi sombra
que es la única que espera
que siga hablando de ti.

En corto...

Me enamore de tu sexo
mortal y enardecido
que sabía desgarrarme el alma
partiéndome en dos
con su filo.

Sin título, sólo una reflexión.

Hay que poner atención a los sueños,
sino el universo conspirará contra nosotros mismos.

A mis muertos...

A mis muertos, que después de todo siguen por aquí rondando...

Y quién me asegura que no estoy muerto,
que el mundo no es más que una enorme sala de espera,
una parada de tranvía,
que nuestro paso en este tiempo es una ausencia de vida
o una ausencia de muerte
o una ausencia simplemente.

Y quién me asegura que la tierra no es el infierno,
que tu cuerpo desnudo no es el pecado vivo de la lujuria
que recurrimos a Clío para platicar de la historia,
de los muertos pasados venerados en tumbas,
que no les lloramos porque se fueron y los vamos a extrañar;
lloramos de coraje, de envidia, porque la vida los eligió.

Y quién me asegura que no soy poeta que intenta seducir a la muerte,
que mis letras reclaman el dulce alivio mortal,
que deseo vivirme en lugar de morirme
y que descansen mis restos después de haber cruzado el umbral.

Y quién me asegura que estoy viejo,
que mis canas son la evidencia del tiempo,
que mi cuerpo encorvado no indica que me estoy callendo,
y quién me asegura que me estoy muriendo.

A ti que no existes...o si?

Si llegas o no, no me interesa
abrí la ventana y afine el olfato
esperando recuperar
sólo un halo de luz extraviado.

Puse a tono mis sentidos
para guiarte hasta mi cama
prendí incienso para que sepas
cual es mi ventana.

Nombre de mujer te has puesto
para coincidir conmigo en este universo
si llegas o no, no me interesa
ya que te tengo aprehendida en mi verso.

No te iras nunca, porque nunca has llegado
el nunca no existe y las tres han pasado
la noche es madura y el sueño pesado
y yo te dejo libre, como siempre has estado.

miércoles, octubre 07, 2009

Ya no hay más

Quizás siempre estás donde no debes,
a veces al despertar, eres el primer momento de lucidez.
Te busco en lugares sin que me veas y te llevo escrita palmo a palmo en servilletas.
Son sólo escritos que tal vez nunca leerás.

Hoy te ví sin que me vieras y me hiciste reír.

No sé, tal vez pasa lo mismo contigo, pero lo nuestro siempre será incandescentemente intermitente, como el rayo que ilumina el océano nocturno, cuando el faro se queda sólo en la costa, varado, extraviado, sin ti, como yo.

Es probable que el quizás este de más, como siempre yo he estado en tu vida, solo, viendo pasar los años afuera de tu casa, contemplándote, como creces, como te enamoras, como te conviertes en mujer.

Te pones piel de mujer encima, todas las mañanas
luciendo bella, limpia, iluminada
después de tanto tiempo, sólo queda el arrepentimiento
de no volverte a ver.
I´ll try to be nicer, If you´ll try to be smarter!!!

Nada más por hoy...